Europa Press ha desvelado que la UICN está pensando en
desminuir el grado de amenaza del Lince ibérico de “En Peligro Crítico” a “En
Peligro” (mira en este enlace).
Evidentemente sería una buena noticia si fuese real, pero a mi juicio bajarle
la categoría sería un gran error y no se justifica con la realidad.
La cuestión es que con los criterios de la UICN, una especie
cuya población está en aumento, solo puede estar En Peligro Crítico si tiene
una distribución inferior a 100 km2, que no es el caso, o si tiene una
población inferior a 50 individuos maduros. Sin embargo, si su población
presentase un declive, valdría con que tuviera menos de 250 individuos maduros.
La clave es que la tendencia positiva del lince ibérico es
debido a un programa de recuperación intensivo, llevado a cabo principalmente
por la Junta de Andalucía. Este programa se ha está llevando a cabo en buena
medida por el hecho de estar en la categoría de En Peligro Crítico, por lo que
de reducir su categoría se reduciría también su prioridad, y tal vez los fondos
para mantener este crecimiento “artificial” de la población.
Hay que tener en cuenta que en la actualidad todavía estamos
por debajo de los 250 individuos maduros, menos aún si tenemos en cuenta los
realmente reproductores, y que en estas circunstancias muchas especies están
calificando como En Peligro Crítico.
A mi juicio, los criterios de la UICN, que siempre he
defendido, tienen un importante defecto y es que infravaloran el riesgo de
extinción de las especies que están siendo objeto de importantes medidas de
conservación.
Por lo tanto, aunque debemos alegrarnos de que los planes de
recuperación del lince estén dando sus frutos, me parece muy precipitado
reducir su riesgo de extinción. De hecho me parece que sería hacernos un poco trampa
en el solitario. Vamos a centrarnos ahora en que la crisis económica no afecte
a la recuperación del lince y ya veremos en unos años si esta tendencia no
tiene marcha atrás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario